viernes, 27 de julio de 2012

LO QUE HAY QUE SABER SOBRE EL CONSENSO OLÍMPICO DEL ‘92



Este verano tocan olimpiadas.  Y si no le gusta el caldo tenga dos tazas. Olimpiadas  por partida doble, al menos en Catalunya. Las  inglesas y el “revival” del 92. Tv3 nos acosa con documentales día sí y día también sobre lo genial que fue  BCN ’92. Lo peor de todo no son los juegos sino esa cancioncilla machacona y falsa del “consenso olímpico” como la clave del éxito de un país y una ciudad.


“Los mejores juegos de la historia”, decía Samaranch. Pues claro, qué iba a decir, seguro que en el 92 disfrutó más que cuando era alcalde franquista de BCN, o no, vaya usted a saber. El éxito de Barcelona se construyó sobre le mito del consenso, donde todos fueron a una, solidarios, unidos, sin disonancias, movidos por un solo objetivo, ahí estaban Pasqual Maragall, Felipe Gonzáles, Jordi Pujol, su majestad el rey y su otra majestad el rey de la rumba (Peret).¿Pero realmente fue así?


Es cierto que hubo consenso, pero un consenso oligárquico-inmobiliario. El mismo que nos ha llevado hasta aquí. Fue el principio del desastre. Inmediatamente después de este gran consenso olímpico empezó la primera gran crisis de la democracia española. Lo he intentado explicar aquí. Los hitos de este consenso empiezan con la transformación olímpica de Barcelona (PSC), pasa por la expo de Sevilla (PSOE) y sigue con la Ley de suelo (PP) todo adereazado con mucho crédito, mucho ladrillo hasta terminar en esta explosión atómica de Fukushima/Bankia. Madrid tras los pasos de Nueva York: primero tuvo su 11S en Atocha, ahora su Lehman Brothers en Bankia…


Recientemente en una de las muchas manifestaciones que se han convocado pude leer un cartel que decía “PP y PSOE la misma mierda son”. Y otro más sintético que decía simplemente “PPSOE”. Inmediatamente me acordé de una frase de Felipe González durante su última legislatura. A propósito de Anguita y Aznar dijo de ellos “son la misma mierda”. Luego tuvo que pedir disculpas y rectificó a su manera, “lo que quise decir es que son la misma cosa”. Examinando con un poco de detalle el consenso olímpico y sus consecuencias estoy 100% de acuerdo con las sabias palabras de González, y lo parafraseo a gusto. PSOE y PP son la misma cosa.   



jueves, 26 de julio de 2012

ARTUR MAS: EL ÚLTIMO PARIPÉ de la temporada


 



Gran escenografía ayer en la Ciutadella. El parlament de Catalunya con invitados de lujo fue testigo de lo que Mourinho llamaría “teatro del bueno”. Bueno no, buenísimo. Si fuera cine les daban el Oscar. Cuánto arte, qué aire de trascendencia, qué solemnidad. Una farsa de las buenas con mucho extra y fanfárria para confundir y engatusar al personal.

Porque digámoslo claro, el pacte fiscal, el tancament de caixes, son pura FILFA, una cortina de humo, eso sí, humo del caro, con un remate de momento histórico. Pero el remate va a ser el de la Generalitat que no tiene ni para pagar los bedeles. Cataluña está a punto de ser intervenida. El gobierno central va a empezar a dictarle al digno President lo que tiene que hacer, lo quiera o no. Artur Mas a las órdenes de Montoro. Eso es lo que hay detrás de este crédito ICO que va a llegar después del verano y de todo el paripé del Pacte fiscal. ¡Cómo me acuerdo de Mourinho! Todos sabemos lo que hay, y hay lo que hay (telarañas); que no nos vendan la vespa. “La vida es así” dice Montoro y todos saben (los catalanes más)  que qui paga, mana.

lunes, 23 de julio de 2012

CONTRADICCIONES, A LOS ESPAÑOLES EL FUTURO DE OBAMA NOS IMPORTA UN COMINO.


¡Hay que ver con las contradicciones de esta crisis! Después de un plan de ajuste económico más severo que el Plan de Estabilización  de 1959, después de que el Bundestag apruebe el prestamo de 30 mil millones a España y de que Finlandia dé su OK,  La prima de riesgo se situa por encima de los 640 bp. Todo el dinero ahorrado en recortes se irá a pagar los intereses del los préstamos qun nos den los mercados. Con esta situación se hace urgente que el BCE nos eche una mano para permitir que nos fianciemos, ¿es eso la intervención? Pues bienvenida sea.

Ni siquiera los economistas   entienden nada de lo que está pasando. Después de estos brutales recortes se calculaba que la prima bajaría lenta pero progresivamente en unos 100 puntos. Pero sigue subiendo el contador. La  presión es crítica. El submarino está a punto de explotar.¿Qué está pasando, se preguntan los expertos, “Pero si hemos hecho lo que tocaba” ¿Por qué los mercados no responden? Ahora sí abiertamente, los mismos economistas hablan ya  sin reparos de Armaggedon.

¿Cual es la causa? Nadie lo sabe. ¿Las contradicciones argumentativas del gobierno? ¿Monotoro enseñando los bolsillos vacíos del Estado? ¿La comunidad Valenciana pidiendo al gobierno central la intervención? ¿La actitud trágica de Rajoy diciendo que no puede hacer otra cosa aunque no le guste nada, víctima de la fuerza del Destino?

Pero más urgente ¿cuál es la solución? Acaso hay que acabar en España de una vez por todas con las Comunidades Autónomas y toda su intrincada maraña administrativa, diputaciones, consejos comarcales, etc? ¿Estamos ante un proceso irreversible e inviable? No olvidemos que las 17 autonomías fueron la manera que encontró Suárez de calmar a los sectores más reaccionarios frente a las demandas de autonomia de Cataluña i el País Vasco. Eso que se acabó llamando popularmente“Café para todos”.

 Y, colocándonos en el otro extremo: qué les pasa a los mercados, por qué esta furia sanaguinaria contra España. Para entenderlo nos tenemos que mover en clave de política internacional. La cosa es compleja. Hace tiempo decíamos que el ensañamiento contra España era un ataque al euro por el flanco débil. ¿Qué quieren los bancos de inversión, los llamados “mercados”? Que Obama pierda las elecciones. Parece que el destino político de Obama está ligado por no sé qué fatalismo al destino de la moneda europea. Mi sentido arácnido me dice que la clave hay que buscarla en estas palabras de Enric Juliana “A cuatro meses de las elecciones presidenciales en Estados Unidos, la presión para tumbar el euro será cada vez más fuerte. Hay mucho dinero en juego y una apuesta política de altísimo riesgo, Si el euro se rompe, si Europa se parte en dos, el impacto en Norteamérica será muy fuerte y Obama puede ser derrotado en las urnas. Están en juego muchas más cosas que la intervención integral de España y el eventual desmoronamiento de Italia. Europa puede ser la tumba política de Barack Obama”.

A nosotros personalmente en España el futuro de Obama nos importa un comino. Lo que nos importa (y preocupa) un poco más es el el desdén y la indiferencia de Mario Draghi.
ACTUALIZACIÓN DEL 27 DE JULIO: Se confirma mi última frase: bastaron unas palabras amables de Draghi y la prima cayó casi 100 puntos !!

martes, 17 de julio de 2012

El precedente lejano de nuestra crisis EL FATÍDICO 1993, la RESACA OLÍMPICA

Nada nuevo bajo el sol. Me gustaría recordar el momento histórico que vivimos actualmente a la luz de la anterior crisis de desempleo. Recordar errores pasados puede ser útil en el momento presente. Sí, la crisis anterior se solventó con el ladrillazo, una bomba de relojería de efecto retardado que nos ha llevado a la crisis actual. ¿Pero qué originó el ladrillazo? Corría el año 1993, justo acababamos de salir del hiperbólico periodo de celebraciones y fastos sin fin del año 92, yo era un adolescente en esa época, por eso simpatizo con los nini de ahora.¡Cómo olvidarlo! coincidieron el mismo año las olimpiadas de Barcelona, la Expo de Sevilla, el Quinto Centenario del descubrimiento y el Año Xacobeo, ninguna parte de España sin su magno evento. Un dispendio en inversión pública y deuda sin precedentes que sirvió para camuflar por un breve instante la tormenta que se avecinaba y que cayó sin piedad al año siguiente. España experimentó el mayor desempleo de su historia en democracia, rozando el 25 %, casi com ahora, diriamos, 4 millones de personas de entonces.

Lo más destacados de los fastos del 92 es que dejaron a los españoles montados en una sensación de euforia económica/psicológica totalmente en desacuerdo con la realidad. El recurso al crédito mantenía la máquina en funcionamiento. Pero los mercados empezaron a castigar subiendo las tasas de intereses por préstamo. España volvia al lugar en el mundo que le correspondía, más cerca de África que de Europa, país de tercera regional. Por ello se hizo más poderosa en la mente del presidente Felipe Gónzalez, con ínfulas de estadista universal, la pertenencia a la Unión Europea a toda costa. Por eso había que forzar la máquina y eludir cualquier consulta popular porque los criterios de Maastrich exigían reducir el gasto público y recortar el estado de bienestar, medidadas que no podían sentar muy bien a una población con un 25% de la población en el paro.

El ministro de economia de entonces, Carlos Solchaga, no tuvo más remedio que devaluar la moneda tres veces consecutivas con la consiguiente péridida de poder adquisitivo del español, más de un 20% en total. Se reformó en sentido neoliberar el mercado de trabajo para abaratar el despido, el eufemismo de la época era “flexibilidad laboral” y el resultado sin eufemismos fueron los bien llamados “contratos basura”: los empresarios recibían subvenciones estatales por contratar a jóvenes  por 40.000 pesetas al mes y sin cobertura social.

En este contexto empezaron a aflorar escándalos de corrupción que afectaban en un primer momento al sistema financiero, de nuevo grandes similitudes con la situacción actual.  El banco Español de Crédito BANESTO dejo un agujero de  5 mil millones de pesetas. Banesto fue el precedente de Bankia. EL primer escándalo de corrupción que salió a la luz involucraba una sociedad que gestionaba activos finacieros (IBERCOP) que traficaba con información priviliegiada en bolsa para beneficio de unos pocos.

 A nadie se le escapa que hay elementos muy simialres en ambas situaciones: falsa euforia, paro desbocado, agujeros negros en la banca, presión de los mercados. Condiciones impuestas desde Alemania. Ya entonces el diario el Mundo sentenciaba (25 febrero 1993) “España está prisionera del marco alemán”.